Sensibilizando a Nuestros Futuros Sustitutos

Durante el periodo de mi adolescencia escuché una frase que rezaba así: "Todos somos importantes. pero no imprescindible"

Según me expresó el el Sr. Juan Bautista Adames esas palabras fueron emitidas por el extinto Dr. Joaquín Balaguer, personaje pintoresco de la República Dominicana quien siendo presidente del país se dirigió con estos términos a unos de sus funcionarios, en momentos que éste (el funcionario) presumía de sus dotes (conocimientos) y le hacia ver a sus semejantes que dichos atributos le garantizaban su permanencia en el puesto público, lo cual no fue así jajaja

La situación actual guarda mucha relación con lo sucedido hace mas de 35 años, y ésto se debe a la influencia política partidista registrada en las instituciones publicas a la hora de designar a un ministro en una entidad cualesquiera y por si fuera poco, a los demás integrantes del mismo organismo o entidad.

Para nadie es un secreto que quienes dirigen las instituciones pública en nuestros país son altos dirigentes de partidos políticos y este factor tiene mayor peso, que las cualidades o la preparación académicas que éste ostente o No, con relación a la entidad que dirigirá.

Este es uno de los factores que impides que una institución pública en verdad ejerza con eficiencia la misión por la cual existe. Para que nos hagamos una idea Usted no puede dar lo que no tiene, es decir; Si yo no tengo conocimiento de medicina a que me pongo a dirigir una entidad compuesta por expertos en medicina. a menos que me deje asesorar por quienes en verdad tienen conocimientos en la materia, pero para el actual sistema imperante, esto constituye un estorbo.

Saco esto a colación. porque para la misma entidad en que laboro esta practica es muy constante.

La conciencia me dice que cuando vamos para un puesto publico, nuestra obligación es servir a todo el que necesite de nuestro servicio, sin importar ser partidario o no con quienes nos soliciten ¡

Es por ello que viendo el clima imperante de insensibilidad, de desigualdad, la falta de respeto a nuestros semejantes, la apatía entre otros detalles que impiden el buen funcionamiento de muchas entidades, me he propuesto aprovechar el periodo denominado como Efemérides Patria (Enero-Marzo) para desde el área de Participación Comunitaria llevar un tema relacionado con los ideales de nuestros patricios (Duarte, Sánchez y Mella) con la intensión de socializarlo con Alumnos de 4to del nivel medio de algunos centros educativos pertenecientes a mi Distrito Escolar.

Quien redacta, lleva mas de 6 años con esta practica. y lo hago para tratar de sensibilizar a nuestros futuros sustitutos porque en esta vida no somos estables y el puesto que desempeñamos tarde o temprano Nos relevarán.

Nuestros relevos han de ser servidores  públicos de vocación pensar en que en la misma medida que ejerzan sus misión con eficiencia y apego a los principios éticos y morales ya establecido, el único ganador será la patria de Duarte.

Si tenemos instituciones funcionando, entonces tendremos un País avanzando por el camino correcto. Con la puesta en practica de buenas acciones. también estaríamos dando un buen ejemplo a la generaciones venidera.

Quienes dirigen las instituciones públicas desde el nacimiento de esta nación, hasta la actualidad, solo se han preocupado por su bienestar particular y de sus allegados.

Los recursos económicos que manejan lo destinan a su criterio. y No como lo establece el protocolo que rige la institución.

El enriquecimiento iíicito constituye una feroz competencia entre quienes dirigen los puestos públicos, de tal grado que al día de hoy según lo han informado algunos medios de comunicación de la localidad, son mas de 1.200 servidores que aun no han presentado una declaración jurada de bienes como lo establece la Ley.  

Acciones como estas y otras mas que por razones de tiempo No cito, constituyen una verdadera ABERRACIÓN a los pensamiento e ideales de Juan Pablo Duarte.

Y peor aun, toda la practica ejercida por quienes dicen ser auténticos pupilos y descendientes  de figuras Ilustre como la del Dr. José Francisco Peña Gómez y el la del Prof. Juan Bosch constituyen la peor ofensa a la memoria de éstos personajes y por si fuera poco una grotesca burla a quienes en verdad tenemos aun dos centavos de juicio.